Las enfermedades ampollares hereditarias en las que la separación dermoepidérmica se produce en la lámina lúcida de la membrana basal se pueden clasificar en: .
Clínicamente 3 subtipos:
a) la EAJ gravis, letal o tipo Herlitz (EAJ-H)
b) la EAJ atrófica generalizada una variante no letal con ampollas, atrofia cutánea, alopecia, distrofia ungueal e hipoplasia del esmalte dental y piqueteado dental, en la que se han identificado mutaciones en el gen COL17A1 , y
c) la EAJ con atresia de píloro.
La EAJ-H es una enfermedad autosómico recesiva, poco frecuente y alta morbimortalidad. Su incidencia se sitúa alrededor de 1 caso por 200.000 habitantes.
Se caracteriza por formación de ampollas de amplia distribución en piel y mucosas, tras mínimos traumatismos, desde los primeros días de vida. Aparecen lesiones en las puntas de los dedos por el roce con las sábanas, y en la cintura o las extremidades por el mero hecho de sostener al niño entre los brazos. Las ampollas se rompen con facilidad dejando grandes erosiones cutáneas.
A diferencia de las epidermólisis distróficas, las lesiones se resuelven sin cicatriz ni quistes de millium. Suelen tardar en reepitelizar, lo que produce pérdida de la barrera cutánea, aumentando el riesgo de infecciones y de deshidratación. La afectación mucosa se produce principalmente en la boca, debido al roce con la tetina del biberón, y el tracto gastrointestinal.
Se manifiesta como erosiones dolorosas, que dificultan la alimentación, y malabsorción, progresando a desnutrición.
También se afecta la mucosa respiratoria, manifestándose al inicio con llanto ronco y mayor predisposición de bronquiolitis. Cursa con agenesia de uñas o son distróficas y habitualmente se observa un tejido de granulación exuberante periungueal. Posteriormente suele aparecer anemia y se enlentece el crecimiento. Habitualmente la enfermedad se tiene complicaciones como sepsis y distrés respiratorio que contribuyen al pronóstico desfavorable. En la mayoría de casos la EAJ-H, más precisamente sus complicaciones causan la muerte de la mayoría de los niños a durante el primer año de vida.
La EAJ-H está causada por mutaciones en los genes que codifican diferentes componentes de la laminina 5, una molécula de adhesión de la matriz extracelular que descansa sobre la membrana basal y conecta ésta con los hemidesmosomas de la cara inferior de los queratinocitos basales . Se trata de una glucoproteína compuesta por 3 subunidades denominadas α 3, β 3, y γ2. Los genes de estas subunidades se localizan en el cromosoma 18q (3 LAMA3) y en el 1q25-32 (3 LAMB3 y 2 LAMC2). En caso de homocigosidad o heterocigosidad compleja esta glucoproteína no se expresa en la lámina lúcida y se detectan mutaciones nonsense, inserciones o deleciones en ambos alelos de alguno de los 3 genes mencionados, aunque el que está alterado con más frecuencia es el gen LAMB3 (50 %). También se han descrito mutaciones hotspot como la R635X.
Diagnóstico: exámen con microscopio electrónico de una biopsia cutánea de piel sana, donde se pueden observar la ruptura en la lámina lúcida, un número reducido de hemidesmosomas que además son hipoplásicos.
Una alternativa en el diagnóstico de las epidermólisis ampollosas es el mapeo antigénico por inmunofluorescencia, usando anticuerpos contra las proteínas estructurales de la región de la membrana basal tales como el antígeno del penfigoide ampolloso (BP180), la laminina y los colágenos tipo IV y VII. El conocimiento de la localización ultraestructural de dichos antígenos permite determinar el plano de hendidura. Como en nuestro caso, en la EAJ-H el mapeo antigénico muestra los colágenos tipo IV y VII en el suelo de la ampolla y el BP180 en la cara inferior del techo de la misma. Como es lógico, en la EAJ-H la tinción con anticuerpo antilaminina 5 (anticuerpo monoclonal GB3) es negativa o muy débil .
Para el diagnóstico prenatal puede usarse la biopsia fetal por amniocentesis.
Bibliografia:
JM Casanovaa, RM Martía, M Baradada, R Egidob, JM Mascaró.Síndrome de Bart asociado a epidermólisis ampollosa hereditaria letal (Herlitz). Actas Dermosifiliogr. 2006;97:658-61. - Vol. 97 Núm.10 DOI: 10.1016/S0001-7310(06)73489-5